martes, 15 de diciembre de 2009

LA SADHANA




¡No vayas al jardín lleno de flores!
¡Oh amigo! no vayas allí; En tu cuerpo está el jardín lleno de flores, Siéntate sobre los mil pétalos de loto, y contempla allí la infinita Belleza. (Kabir) 

Ahora que empezamos a estar inmersos en eso que se ha dado en llamar "Espíritu Navideño", que supuestamente consiste en compartir, amar, y dejar los malos rollos atrás, a mí me ha dado "un no se qué" nostálgico que me ha hecho mirar para atrás, y repasar toda una vida vivida como " sadhana" 

Tengo claro, y entre amigos siempre lo comento, que cualquier acercamiento a la verdad, no importa cual sea la vía elegida, dará sus frutos dependiendo de la seriedad, del interés que se haya puesto en ello, porque es el interés y la seriedad, lo que nos advierte constantemente de que el camino debe de estar en la misma dirección que la meta, y que lo interno y lo externo ya son uno.

Cuando hay una clara intuición de lo prioritario en la vida, aunque no se sepa cómo, siempre aparece ese maestro interior que amorosamente nos guía de la manera más adecuada a descubrir esa esencia que cada uno llevamos dentro. 

En esa mirada atrás de la que hablaba, a partir de un encuentro casual con Antonio Blay, hace ya muchos años, comenzó mí interés en comprender y ordenar la mente, y posteriormente las escuelas de yoga más tradicionales me han ayudado a conocer, querer y respetar el cuerpo. Asentar las bases de una vida meditativa a través de una constante indagación, ha mantenido mi mirada y anhelo puestos en todo aquello que traiga el perfume de como el buscador y la propia búsqueda forman ya parte de mi esencia y de que, por lo tanto, no es cuestión de acumular conocimiento, sino de limpiar la visión , de comprender y de soltar, porque ningún esfuerzo me puede llevar a eso que es ya mi hogar, y por lo tanto lo más cercano que tengo. 

He podido ir aprendiendo de todo, puesto que todo, más allá del nombre y la forma, lleva al mismo origen. Esa enseñanza ha ido llegando a través de las palabras de los sabios, entre los que tengo un lugar especial en mi corazón para Nisargadatta, quizá por haberlo conocido en un momento de madurez adecuado, y también de los amigos, de algunos en especial con los que he tenido la suerte de compartir las dificultades, las dudas y también las alegrías que iban surgiendo en el camino. Pero en esa apertura a la vida, he podido aprender también de mis vecinos labriegos, en años intensos de vida en el campo, de su sabiduría innata y del saber fluir ante las adversidades de la vida, he aprendido de la naturaleza, de sus ritmos y de sus ciclos, de su inmensidad y de sus inexorables cambios, y hasta del pato que sobrevolaba mi casa todos los días a las cinco de la tarde y me recordaba que ya era hora de salir a caminar.

Esa sadhana de discernimiento y purificación, permite que la mente se gire, y en lugar de quedarse apegada e identificada con lo que ve, oye o siente, mire hacia adentro, y vaya abriendo camino a esa conciencia que ha estado siempre ahí, posibilitando que lo que sucede pueda ser conocido. Y sigue siendo el interés hacia ese vivir siendo ya lo que soy, el que se alía con la inteligencia de la vida para reconducir ese no-ser al ser, lo irreal hacia lo real, lo cambiante a lo que no cambia, en un continuo proceso de iluminar lo que aún está oscuro. 

Algunos privilegiados pueden ser como leña seca, que arden en cuanto se les acerca una cerilla, pero otros vamos subiendo las escalera a empujoncitos, y sin saber nunca donde estará el último peldaño, aunque mi amigo Agustín diga...."que para qué escalera...desde que hemos descubierto el ascensor"... En algunos momentos...., después de toda una vida...., me siento como esos viejos lobos de mar del pequeño pueblo asturiano de mi madre, que al atardecer, se sientan en el muelle a ver llegar las lanchas que han salido a faenar, sabedores que ellos ya han hecho su trabajo, y que lo único que esperan de la vida, es disfrutar de ese sol que calienta sus huesos.... A partir de ahí la sadhana consiste en amor en acción ....


13 comentarios:

Sankara dijo...

Querida Beatriz.

"Cuando hay una clara intuición de lo prioritario en la vida, aunque no se sepa cómo, siempre aparece ese maestro interior ...."

Una verdad incontestable, el Maestro siempre nos acompaña.

Namasté.

Delia dijo...

Beatriz:

Comunicar la propia experiencia puede ayudar a descubrir aspecto de la misma que se nos habían pasado por alto.

Leyendo lo tuyo rescato tu encuentro con un maestro que te condujo a la comprensión y ordenamiento de la mente, yo tuve esa misma experiencia y la agradezco porque para mí era necesaria, quizás no lo sea para todos.

Asimismo tengo siempre presente la actitud de la gente que sin mucha instrucción, sin haber leído ni hablado de estos temas, ven la vida con la confianza que sólo la sabiduría puede otorgar, y la importancia de la observación de la naturaleza para comprender lo que es sin cuestionarselo.

Tu post es un buen regalo para estas fiestas, gracias.

Un abrazo.

Beatriz Moro dijo...

Hola amigo Sankaradas:

A veces uno necesita alguna perpectiva para reconocer esa luz interior que siempre ha estado ahí, cuando lo demás fallaba.

Un abrazo Bea

Beatriz Moro dijo...

Amiga Delia:

Me alegro de que compartas mi experiencia, yo tambien creo que es difíl dejar atrás algo que no esté en orden...., pero en fin eso es lo que tenia reservado la vida., a llegado en el momento que tenia que llegar y ha sido una bendición.

También lo que dices de las personas sencillas y de corazón puro, que yo creo que aunque no sean sabedoras de su riqueza, sin embargo tienen menos velos encima para dejarla traslucir.

Son de agradecer los comentarios que haces aportando siempre claridad.

Gracias, yo también te deseo Felices Fiestas y un abrazo

Bea

Anónimo dijo...

Esa entrada , querida Beatriz apunta a un Abrazo...Abrazando todo lo vivido...siendo Abrazada por EL SER.
Y en ese camino vivido...todo puede ser Sadhana...práctica para despertar a lo que YA SOMOS en realidad.

Un ... Abrazo!


Carmen
indivisemanent.blogspot.com
concienciaprimordial.blogspot.com

Beatriz Moro dijo...

Querida Carmen:

¡Que bonito!

Donde yo creia que fluia un movimiento emocional nostálgico, tu visión de percibirlo como un abrazo me ha hecho despertar esa mirada amorosa de "lo que soy" hacia lo que simplemente "sucede"

Gracias por esta claridad.

Un abrazo Bea

(z) Victoria dijo...

Hola Bea! Es curioso como cuando echamos la vista atrás parece que toda cobra un sentido y una dirección, y lo que es más: todo parece PERFECTO!
Gracias y un abrazo!

Beatriz Moro dijo...

Hola Zenara:

Yo también lo siento así.

Supongo que la identificación y la carga emocional con la que a veces se vive el presente impide ver a esa sabiduria de la vida trabajando siempre por equilibrar los opuestos.

Gracias por estar ahí, siempre aportando.

Un abrzao
Bea

Delia dijo...

Hola Bea:

Paso para agradecerte tu visita, agregué a la entrada tu comentario y el de Sankaradas porque la enriquecen y le dan claridad.

Un beso.

gb dijo...

Buenas y frías tardes BEATRIZ

Muy adecuada esta entrada, para hacer la reflexión del final de un ciclo. A veces se suele pensar que la SADHANA es nuestro camino, y en el destacamos nuestro encuentro con este u otro maestro, este o aquel momento y eso es cierto, si bien hay muchos más momentos que de los que no me acuerdo, desde aquel primer aliento, esos momentos de LUCIDEZ en los que casi no reparo, ese atardecer, esa comprensión, ese momento cuando "hago" el AMOR "humano DHARSAN en el fondo, cuantos y cuantos momentos nos dejamos atrás. Esos momentos en los que casi sin darnos cuenta nos encontramos SIENDO.
Gracias por compartir.
namasté

pranava das

arianna dijo...

Hola Beatriz, tu blog me atrae, pasaré a menudo a visitarlo, hablas de "La Sdhana" y demás prácticas relacionadas con Yoga que practico desde hace tiempo, me interesan estos temas q. seguro conoces mejor que yo

Dice un bello proverbio tibetano que el pájaro del espíritu humano sólo puede levantar el vuelo sirviéndose de sus dos alas, la una la sabiduría, la otra la compasión
Al hilo de lo q. comentas en tu post dejas ver las dos cosas y a ese maestro interno q. aparece en tus reflexiones
Parece que tu peregrinar ha sido y es positivo cumpliendose el camino trazado hacia la meta que anhelas, es una suerte y una dicha ver q. lo vas consiguiendo
mi camino es serpenteante pero alegre. la meta la veo lejana aunque con esperanza, hasta aceeder al Ser, mi yo profundo, mi verdadera naturaleza y entender que la verdad y la luz están dentro de cada uno, queda trecho por recorrer

Gracias por tu entrada
Es un placer entrar por aqui y leerte

Feliz noche

Beatriz Moro dijo...

Hola gb:

Buena reflexión, yo también percibo como en esos momentos de quietud mental,o en esos espacios vacios entre dos experiencias o pensamientos, o en ese abandono del "yo" que se produce en muchas ocasiones, la dimensión de SER se hace manifiesta, se ensancha y profundiza, permitiendo que todo lo que aparecezca sea revestido de su luz.

Gracias por tu valiosa aportación.

Un abrazo Bea

Beatriz Moro dijo...

Hola arianna y bienvenida a éste que es tu espacio también.

Como dices tener interés en conocer tu naturaleza real, estoy segura que cada paso que des te irá aproximando al siguiente, porque ese interés no es otra cosa que esa conciencia que ya eres, queriendo quitar los velos de la mente y brillar.

Un abrazo

Bea